SEXO, MENTIRAS Y VIDEOHOME
LA ULTIMA TENTACION DE CHRISTIAN GONZALEZ

Nota realizada por Alberto Acuña Navarijo

¿Quién diablos es Christian Gonzalez? Es el representante más importante del cine de culto contemporáneo en México, un director que ha desafiado todas las reglas y convencionalismos, realizando filmes de genero que trascienden y sobrepasan él genero mismo, demostrando que él termino "de culto" en dicho país va mas allá de luchadores, narcotraficantes o sexy comedias, optando por una obra plagada de violencia, sexo, humor negro y mucha naquez, siendo el único realizador que lleva hasta sus ultimas consecuencias sus tramas e ideas. Es un autor que transita en todos los campos (cine comercial, cine de arte, independiente, el infracine, el videohome) pero que no pertenece ninguno, combinando proyectos personales con otros por encargo para sobrevivir, es él más prolífico (con mas de 80 cintas en 10 años), él más versátil, un sujeto que los festivales y premios no le quitan el sueño, pero curiosamente también es él mas subvalorado e ignorado por la critica y publico. Pero una cosa es segura; si uno se atreve a ver una cinta de Christian Gonzalez -cualquiera que sea esta- implica esperar lo inesperado, disfrutar del exceso y dejarse llevar.

Una de las primeras cosas que se destaca de la filmografía de Gonzalez es que esta alejado de las modas y nada a contracorriente de las tendencias del cine mexicano de hoy día. Es cierto, Amores Perros, Y Tu Mama También,De la Calle o Perfume de Violetas triunfaron alrededor del mundo, pero son cintas que presentan algo irreal o situaciones artificiales, y que lamentablemente sé esta exhibiendo como algo erróneo alrededor del mundo por lo que en pocas palabras no hay una identificación por parte del publico mexicanoy si un asombro por lo folclórico del país para el circuito extranjero; ya que la mayoríade los directores quieren hacernos creer que una de dos: o todos viven en zonas exclusivas o por el contrario todos viven jodidos, pero en situaciones en ambos caso inverosímiles. Por su parte el videohome -la verdadera industria que ha sostenido al cine mexicano por varias décadas- al ser un cine más populachero el absurdo en la mayoría de las producciones -aun siendo bastante buenas- no tardan en salir. Así judiciales honestos al servicio de la justicia, vengadores anónimos, y toda una "plaga" de personajes como los son los cholos, los niños de la calle o prostitutas buenonas son los protagonistas infaltables de estas cintas que caen mas en lo parodico que en otra cosa. En cambio Gonzalez aun moviéndose casi siempre en este ultimo terreno -por que es el que más deja- no cae en la tentación fácil y casi nunca se deja amedrentar por los productores y estudios y presenta otro contexto muy diferente.

Por lo tanto en sus cintas si vemos a los niños vagabundos en verdaderos escenarios de la ciudad, a judiciales como unos malditos y no como una caricatura, vemos lugares como el puesto de quesadillas, el mercado sobre ruedas, el metro, los pasos a desnivel llenos de mugre y orines y a todos los personajes utilizando un lenguaje más cercano logrando así una gran identificación con él publico que si ha querido y podido valorar su obra. Ha formado así una filmografía arriesgada y explícita donde todo esta permitido, rayando en mas de una ocasión en lo delirante (como puede ser una castración con la boca que le propina una mujer a un proxeneta en (Por un Salvaje Amor, 1992). Como se menciona líneas arriba otro punto que diferencia entre Chistian y el resto, es su extraña mezcla de autor y director por encargo. Al ver una cinta de el, suponemos que es un trabajo intensamente personal pero lo cierto es que es por puro pedido (algo que es muy común en ese mercado) pero la diferencia consiste en que por su rapidez economía de recursos, este es muy confiable para los productores, que a cambio de esas ventajas y garantías deben aceptar que haga lo que quiera con el material base (como transformara su antojo un guión ajeno, y meter todo tipo de sellos distintivos) aunque el problema principal que enfrenta un realizador marginal como Gonzalez en un país como México es la censura, por lo que al rebasar los limites constantemente, en mas de una ocasión sus cintas se han visto en la problemática de estar enlatadas algunos años o sufrir de abruptas ediciones (ya sea por el productor o por los directivos de regular los contenidos) como le sucedió con 38 Expansiva (1996) que al contener una gran cantidad de escenas de sexo explicito y una temática aguda fue recortada casi 30 minutos. Gonzalez esta consciente que su cine es solo para la gente de abajo; él afirma que su obra esta dedicada al judicial, a la prostituta de $10, al carterista, al vagabundo que paga unos pesos para pasar un buen rato viendo una película, a la sirvienta o al chavo banda de cierto barrio perdido de la apocalíptica Ciudad de México.

Es sorpresivo que su debut en el mundillo del cine (después de salir del CUEC una de las escuelas de cine más prestigiosas de México) fuera por la puerta del arte pretencioso, que él a distancia, reconoce que lo hizo mas por creer que esa era la manera de trascender que por estar convencido. Así inicia con un mediometraje que exageraba en lo experimental y artístico llamado Thanatos (1986) y el largometraje Polvo de Luz (1989) una cinta indigesta acerca de la vida y la muerte en la historia de un pintor que al saber que sus días están contados trata de hacer un viaje espiritual. Por supuesto amabas cintas fueron despedazadas por la critica "seria" y no duro ni una semana en cartelera. Al toparse con el error que significo entrarle al arte, se decidió que la mejor manera de hacer lo que él en verdad quería hacer era en el videohome (además que por supuesto no tendría que angustiarse por falta de dinero o trabajo). Así inicia ese andar con cintas como Seducción Judicial (1990) y El Imperio de los Malditos (1991) cintas que ya mostraban el rumbo de toda su obra posterior y que a la fecha continua: violencia, desfachatez, diálogos filosos, los escenarios reales y sobre todo el uso del judicial como personaje que representa toda la suciedad de la sociedad nacional (algo así como el constante uso de yakuzas en el cine de Takashi Miike para representarnos la doble cara de la gente).


Así el universo personal de Gonzalez esta compuesto precisamente de la escoria de la metrópoli que busca sobrevivir a como de lugar; ahí esta Rojo Total (1995) una versión excesiva de Perros de la calle de Quentin Tarantino solo que en vez de ladrones son los peores agentes judiciales que jamás se ha visto, en vez de una bodega abandonada es una oficina de seguros, la música retro es sustituida por música incidental y la clásica escena de "la oreja cercenada" cambia por una brutal golpiza hacia una joven mujer, también esta Esclavas del Sadismo (1996) en donde se combina de manera brillante una historia policíaca con una erótica, una relación incestuosa y algo de terror psicológico o El Bulldog (1995) una suerte de Harry el Sucio tercermundista. Pero Gonzalez no solo se restringe al genero en donde el judicial sea el protagonista (ya sea el héroe o el villano); ha realizado cintas de terror (Las Nueve Caras del Terror 1995), de comedia (La Gordita del Barrio 2001), de explotación (la ya mencionada Por un Salvaje Amor 1992), de acción (La Ley del Cholo 1995), drama (Nosotros Los Chemos o Chavos de la Calle), cine de narcos (Narco Gays) o cintas que bien podrían ser la base para los nuevos comics mexicanos (El Clon de Hitler, Darketos o Cabezas Rapadas). Pero sin lugar la cinta por la que Gonzalez es conocido y como el mismo reconoce a la fecha los productores los contratan es La Cumbia Cachonda (1991), la cinta que definiría para siempre todo el cine del autor: aquí están presentes los personajes ya anteriormente comentados (él proxeneta, el vagabundo, el niño mariguano, y la prostituta de buen ver), así mismo existe la presencia de música popular (la cumbia), y escenarios que seguramente a los que creen que la ciudad es como Amores Perros, les dará miedo o asco(calles sin pavimentar, bares de mala muerte, el salón de baile en donde se presentan los "sonideros", los mercados más asquerosos y terrenos baldíos por solo mencionar algo), igualmente aquí ya se gestan esos diálogos chispeantes (mas producidos por la improvisación que por otra cosa como ese genial "¿Quieres cojer?"/"A Guevo"/"¿Tienes Dinero para pagar él motel?"/"A guevo que No") y probablemente como algo básico ya inicia con su gusto por el erotismo, con la explotación, rayando en la misoginia jamás conocida. Esta es la historia de un triangulo amoroso que no dejara "títere con cabeza" formado por una prostituta (la bella Eva Garbo) que trabaja en salones de baile en donde la cumbia es lo que predomina, un proxeneta (Sebastián Ligarde) que hace toda clase de trabajitos sucios y un vagabundo conocido como "El Combi" (Jorge Luke) que dicta su propia ley. La Cumbia Asesina es una sabrosa destrucción de todas las reglas de forma y estructura; es un filme de genero que aniquila al genero mismo, una pelicula todoabarcadora en donde todo puede suceder (peleas en una cantina de mala nota, un viejito que vomita a cada rato, una cena romántica en un puesto de grasosas quesadillas o torturas por partes del proxeneta que no conoce piedad). Si bien es cierto los diez primeros minutos son delirantes por la gozosa vulgaridad que presenta, el clímax deja sin habla al espectador al ser el pisoteo mas divertido de un genero jamás pensado. Después de ello aparecerían dos secuelas más (ambas dirigidas por él) aunque más que secuelas son ganchos para él publico: La Cumbia Asesina 2 (2002) y La Cumbia Cachonda (2002) en donde solo prevalece el actor Jorge Luke y el ambiente de la cumbia como el ritmo que dicta toda la accion. Solo me resta decir que si alguien se dice orgullosamente cinéfilo y/o amante del cine de culto, tarde o temprano deberá toparse con el cine de Christian Gonzalez y sus excesos.